El Swansea City logró ayer el primer título de su historia al coronarse campeón de la Capital One Cup (antigua Carling Cup o, como dirían aquí los más clásicos, Copa de la Liga). Lo hizo tras imponerse por un rotundo 5-0 al Bradford City, un club que logró la machada de llegar a una final viniendo desde la Football League Two, cuarta división del fútbol inglés.
A pesar de la modestia del rival, el título es todo un hito para el Swansea, un pequeño equipo galés que se ha atrevido a competir en la liga más poderosa e importante de Gran Bretaña. Además, la consecución de la Capital One Cup no puede llegar en mejor momento, pues The Swans están inmersos en los fastos para celebrar sus recientemente cumplidos cien años de historia. Todo ello de la mano de Michael Laudrup y con la clave aportación de un grupo de españoles: Chico Flores, Pablo Hernández, Àngel Rangel y, por encima de todos, Michu, indiscutible referente del equipo.
No tardó el Swansea en dejar claro quién iba a ser el campeón en este inédito duelo en lo más alto. A los 16 minutos un disparo de Michu que no logró atajar Duke fue rematado a la red por Dyer. Los Cisnes aprovecharon el gol para retrasar algunos metros sus líneas para invitar al Brasford a adelantarse y tomar más riesgos. Hubo partido hasta que quiso Michu: su segundo tiro a puerta, en el minuto 40, entró ajustado al palo izquierdo, convirtiéndose en el primer español que marca un gol en una final inglesa. Aprovechando el poco espacio y tiempo que necesita para cargar el disparo, apuntó con toda intención entre las piernas de su marca, dificultando la visión del guardameta rival, que no pudo hacer nada porque la pelota entró clavadita a la madera.
El encargado de asistir al asturiano fue Pablo Hernández, auténtico codirector de las labores ofensivas del equipo junto a Leon Britton. El ex del Valencia vive a la sombra de Michu, tanto en lo mediático como sobre el césped, pero partido a partido ha encontrado la regularidad y la confianza, hasta convertirse en un jugador muy importante para Laudrup, que le da mucha libertad para, arrancando desde la banda izquierda, moverse por todo el frente de ataque, haciendo mucho daño en el juego entre líneas.
Al poco de comenzar el segundo tiempo, Dyer hizo el tercer gol, segundo en su cuenta particular, y parece que se le subió demasiado a la cabeza. Diez minutos después el portero del Bradford le hizo un penalti y el ex del Southampton se empeñó en lanzarlo a pesar de que el encargado es otro. De Guzmán aguantó la improcedente insistencia de su compañero hasta que llegó a Michu para acabar con esa fea imagen, lo que nos da una idea de la ascendencia que se ha ganado el asturiano en menos de un año en el equipo. No sólo es la estrella para los aficionados galeses, sino también tiene su peso en el vestuario. El propió De Guzmán redondeó la goleada con un quinto tanto ya en el descuento del partido.
Podría decirse que el Bradford City se ahogó en la orilla tras haber eliminado al Wigan, al Arsenal y al Aston Vila para acabarse citando con el Swansea en la final. Pero la incontestable derrota no deprimió el ánimo de los más de 30.000 hinchas que, desde Yorkshire, convirtieron en un fiesta el haber llegado por primera vez a una final desde su fundación en 1911. El ambiente en Wembley fue inmejorable, todo un espectáculo digno de ver y envidiar: a ver si tonamos nota en España y refundamos la estreuctura de nuestra Copa para darle a los equipos más modestos una oportunidad de hacer cosas grandes.
En las celebraciones del Swansea pudimos ver a Chico lucir una camiseta en homenaje a los héroes caídos de nuestro fútbol: Antonio Puerta, Dani Jarque, Miki Roqué y Manolo Preciado. Un gesto precioso. Supongo que no seré el único que se ha ido haciendo un poco del Swansea, ya desde la llegada de Roberto Martínez al banquillo, desde donde propuso un estilo de juego más combinativo frente al clásico fútbol directo inglés. Una línea seguida por Brendan Rodgers que ha recogido Michael Laudrup para llevar a Los Cisnes a volar muy alto. El título copero les garantiza un puesto en la UEFA Europa League de la temporada que viene. No estaría mal que les tocara enfrentarse a un equipo español.