fran fernandez tenerife

El fin de semana nos ha dejado dos protagonistas, que nada tienen que ver entre ellos, pero cuyos errores les han costado puntos a sus respectivos equipos. Por un lado, Sergio Ramos, que marró dos penaltis consecutivos ante Suiza que, de haberlos metido, seguramente el resultado final (1-1) hubiese sido otro. Por el otro, el de Adrián Ortolá, guardameta del Tenerife, que en un error de cálculo terminó anotándose en propia meta una diana que le costó el derbi canario a los suyos (1-0).

Sin embargo, aquí lo interesante es lo que sucedió después de que los inesperados protagonistas hicieron eso tan normal como es equivocarse, como ya escribí en su día con la noche aciaga de Varane ante el Manchester City. Las reacciones de los entrenadores respecto a las respectivas pifias y cómo uno le quita hierro al asunto y cómo el otro, seguramente fruto del mosqueo y ‘calentor’ pospartido, hurga en la herida, independientemente de que tenga o no razón en sus declaraciones.

Así, más de uno se habrá tirado de los pelos al escuchar a Luis Enrique decir que «si hubiese habido un tercer penalti, o un cuarto, también lo hubiese lanzado Sergio Ramos». Defendiendo ante todos a su capitán y que ante el combinado helvético puso fin a una racha de penas máximas transformadas que duraba 25 lanzamientos. El ‘doblete’ del andaluz da para meter cizaña, sobre todo al otro lado del puente aéreo. Pero Lucho capeó el temporal de manera soberbia restando importancia a lo sucedido, defendiendo a su futbolista y emplazándole a que siga probando fortuna desde los once metros.

En cambio, las declaraciones de Fran Fernández, técnico del Tenerife, no dejan en excesivo buen lugar a Ortolá. Más o menos viene a decir que le responsabiliza de la derrota ante la UD Las Palmas, en ese derbi que suele ser tan caliente y que nadie quiere perder. Habla de un «error que no es de fútbol profesional», que «nos ha costado el partido» en lugar, seguramente, de tratar de buscar culpables en otras decisiones o situaciones que a lo largo de los 90 minutos, también terminaron decantando la balanza. Sabedor de la ‘cagada’ de Ortolá, de fácil que es tirar a dar en situaciones así, ¿no hubiese sido lo propio echarle un capote a su guardameta?

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  • Todos hemos visto con nuestros propios ojos la pifia de Ortolá y el punto ―uno, que no tres, porque el Tenerife no iba ganando ni mucho menos― al que ha privado al cuadro blanquiazul. Es decir, quizá sobraba hacer leña del árbol caído. Aunque Fran Fernández pueda tener toda la razón del mundo, pueda estar mosqueado por esa acción, quizá es demasiado exagerado achacar a esa acción puntual ―y nefasta― una derrota. Más aún cuando el tanto de Las Palmas se produjo en el minuto 48, con toda la segunda mitad por delante. Si me dices que el error llega en el 93, tira millas. ¿Pero quedando como quedaba medio partido?

    En fin, por suerte, Ortolá no es un recién llegado a esto del fútbol. Tiene 27 años y debería tener ―parafraseando a Luis Aragonés― el «culo pelao» de este tipo de situaciones, tan incómodas pero a las que tanto se expone la solitaria profesión de guardameta. Pero por si las moscas, no tuvo reparo en reconocer su error ―como también hizo Varane― y disculparse ante esos aficionados a los que muchos llaman ‘leones’ y que, como puede verse en su publicación, no son tan fieros. Es más, seguramente en su día a día la pifien ―como todos hacemos― en sus respectivos trabajos. Pero sin una cámara que les grabe.

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    Fernando Castellanos

    Periodismo deportivo. En NdF desde 2006. Hacer todo lo que puedas es lo mínimo que puedes hacer. [ Twitter]