El derbi copa portadas pero quien lidera la clasificación no es ni Real Madrid ni Barcelona. En una jornada donde todos daban la Liga por finiquitada si ganaba el conjunto madridista porque hubiese dejado a siete puntos al eterno rival, y como si el Atlético fuese un convidado de piedra, uno que viene a figurar, el cuadro del Cholo Simeone fue el más beneficiado del resultado en el Santiago Bernabéu. Los siete goles que se vieron en el feudo madridista y que terminaron con triunfo azulgrana colocaron en lo más alto de la clasificación al Atleti, que aprovechando que las miras estaban puestas en el Clásico, venció a domicilio al Betis, al que le pasó factura el derbi de la pasada semana en la Europa League.
La Liga está en un puño y promete emociones fuertes. Y los tres que andan en la pelea también buscarán plaza en los cuartos de final de la Champions League. El calendario se aprieta y quien sepa manejar mejor las fuerzas de flaqueza que suelen aparecer en la recta final, es el que se llevará el gato al agua. Los que ayer, antes del clásico, daban el campeonato por resuelto en caso de triunfo blanco, hoy piensan otra cosa. Personalmente veo al Madrid en otra dimensión, aunque habrá que ver la reacción tras el pinchazo de anoche; al Atlético muy regular y encorajado, y al Barça capaz de lo mejor y lo peor. La conclusión, pues, es inconclusa.