Ver un partido del Milan es como una caja de bombones: nunca sabes lo que te va a tocar. Esto podría extrapolarse al fútbol, que es como la vida misma, pero cuando hablamos del equipo...
Ver un partido del Milan es como una caja de bombones: nunca sabes lo que te va a tocar. Esto podría extrapolarse al fútbol, que es como la vida misma, pero cuando hablamos del equipo...