Se cerró el mercado de fichajes y no fue el Madrid uno de los animadores de última hora: el club blanco hizo pronto los deberes con Rudiger y Tchouaméni y se dedicó de pleno a preparar la temporada, solamente con un ojo puesto en las salidas. Las advertencias de Ancelotti de que no se iba a fichar a nadie más no eran un farol a la hora de entorpecer o encarecer operaciones: realmente no iba a llegar nadie más. Lejos quedan las legendarias operaciones a contrarreloj como la de Ronaldo o las sorpresas de última hora como la reciente de Camavinga. Así las cosas, el Madrid se ha quedado con una plantilla de 23 jugadores que fue campeona de liga y Champions, pero en la que hay varios jugadores que realmente no cuentan y líneas en las que no hubiera venido mal algún refuerzo.
Hubo salidas muy sonadas de jugadores emblemáticos en los éxitos recientes del club, pero que ya no aportaban como antes: es el caso de Marcelo, Bale o Isco. También salió Jovic, cuyo fichaje resultó un fiasco y que no contaba para Ancelotti, además de canteranos como Blanco y Miguel Gutiérrez que no tuvieron el protagonismo que parecía cuando irrumpieron, o cedidos que regresaron para volver a irse como Kubo, Reinier o Mayoral. La salida más importante ha sido sin duda la de Casemiro, el único del núcleo fuerte del equipo que ya no está y que ha sido sustituido en el once por Tchouaméni, que ha caído de pie en el equipo. De esta manera, se podría decir que, respecto al grupo de confianza de Carletto el pasado año, están los mismos más Rudiger y con el cambio de Tchouaméni por Casemiro. ¿Será suficiente para una temporada tan exigente y con un Mundial atípico de por medio?
El limbo de Asensio y Hazard
De la plantilla de 23 jugadores se podría decir que son 18 los que verdaderamente cuentan para el técnico italiano: Courtois, Carvajal, Lucas Vázquez, Militao, Alaba, Mendy, Rudiger, Nacho, Tchouaméni, Kroos, Modric, Camavinga, Valverde, ¿Ceballos?, Benzema, Vinicius, Rodrygo y ¿Asensio? Y está por ver cuánto cuentan realmente Ceballos y Asensio, de ahí el interrogante. Por el momento, Ceballos ha jugado 46 minutos, siempre desde el banquillo y convirtiéndose en un habitual de los últimos minutos, cuando puede aportar empuje y pausa con el balón. Desde luego está jugando más que el pasado año, pero tiene mucha competencia en el centro del campo. Asensio, sobre el que recayó la duda de su posible salida hasta el último instante, tan solo ha jugado siete minutos ante el Celta con el partido ya finiquitado. Una vez que se ha confirmado su permanencia, el balear puede ser importante como recambio como lo fue el pasado año cuando marcó 12 goles, pero no parece Ancelotti por la labor.
Y en un limbo parecido está Hazard, que ha jugado 39 minutos repartidos en los dos primeros partidos ligueros ante Almería y Celta, en los que no marcó diferencias. El belga esperaba que este fuera por fin su año y la afición así lo deseaba, pero siguen sin salirse las cosas. Como 9 no funciona, la izquierda es propiedad de Vinicius con Rodrygo como alternativa y la mediapunta no existe en la pizarra de Ancelotti, quien no le ha dado minutos en los dos últimos partidos. Ahora mismo, se ve lejos la posibilidad de que sea importante en el equipo.
Nadie en lugar de Mbappé
Aparte de Lunin, portero suplente que siempre cumple cuando juega, quedan Mariano, Odriozola y Vallejo, que son poco menos que relleno en la plantilla, o esa es la percepción actualmente. Y eso, en una plantilla de 23 jugadores, puede pesar a lo largo del año. Y donde más faltan efectivos, ya se sabía, es en la zona ofensiva. No llegó Mbappé y no se fichó a ningún delantero en su lugar: la llegada del francés tenía todo el sentido no solo como estrella mediática, sino como un gran jugador que venía a complementar a Benzema y Vinicius, pero el Madrid se ha quedado con lo puesto: con Valverde actuando de (falso) extremo, donde aporta otras cosas al equipo además de su potente zancada en la banda, pero poco gol, y con Rodrygo ganando en importancia, pero en un esquema con tres delanteros se antojan pocos efectivos, tanto en la banda derecha como en un sustituto para Benzema.
El mercado está caro y difícil, y siempre es complicado encontrar jugadores que rindan en un club como el Madrid, pero echando cuentas, no tiene Ancelotti una plantilla demasiado profunda. Pocas dudas pueden recaer sobre los actuales campeones de Europa, pero ya se sabe aquello de renovarse o morir.
