Tebas y la eterna guerra de los horarios
La obsesión de Javier Tebas de que haya fútbol los lunes y los viernes con la excusa, ahora, de que al no haber público en las gradas los aficionados no se ven perjudicados, volvió a sacudir la segunda jornada del campeonato. Hubo que esperar al miércoles para saber los horarios definitivos del Getafe-Osasuna ―previsto para el viernes― y del Betis-Valladolid ―para el lunes―, un hecho que vuelve a poner de relieve las desavenencias entre LaLiga y la RFEF. Tebas, que preside la primera, había solicitado medidas cautelares para que los horarios planteados inicialmente fueran los definitivos, pero la respuesta del CSD, así como del juzgado de lo Mercantil, no llegó a tiempo y al dirigente no le quedó más remedio que pasar por el aro y achacar la resolución de la Juez de Competición de la RFEF del 9 de septiembre, cuando nuevamente se originó el conflicto a días de iniciarse la competición. Una guerra tan absurda que seguirá viviendo nuevos capítulos y que no hacen más que ensombrecer la imagen de una Liga que hace tiempo dejó de ser «la mejor del mundo».
Kang-in Lee y los pecados de juventud
Kang-in Lee tiene 19 años y un futuro prometedor. Sin embargo, de momento, no deja de ser un embrión de crack con las lógicas ganas que uno tiene, superada la adolescencia, de comerse el mundo. Su ingenuidad y atrevimiento, tan necesaria en la etapa de formación en la que se encuentra y el contexto futbolístico en el que se encuentra en un Valencia sin identidad, le pasaron factura ante el Celta (2-1). El surcoreano se adueñó del balón en una falta que estaba dispuestísimo a ejecutar y le hizo el amago a un peso pesado del vestuario como Gayà. Tuvo que aparecer Wass para arrebatárselo y cederle el cuero al capitán ante el palpable mosqueo del chaval. Javi Gracia presenció la incómoda situación y tras el descanso, dejó a Kang-in en el banquillo. Una bajada de humos que debe servirle a la exquisita perla che no para enfurruñarse, sino para saber que las jerarquías han de respetarse. Por suerte, tiene mucho tiempo y la fe del valencianismo para asimilarlo.
Cifuentes: debutar a los 41 años y 153 días
Más que un simple aprobado, lo que merecería Alberto Cifuentes es un monumento en la puerta de su casa. A la persistencia, al trabajo y al no renunciar a los sueños ni aunque hayas superado la cuarentena. Álvaro Cervera sorprendió en su segunda alineación ―como ya lo hizo en la primera cuando puso a David Gil― dando la titularidad al guardameta más longevo en debutar en Primera División. Y Cifuentes respondió con creces en una tarde mágica que no olvidará por otros muchos motivos: el principal, y por el que suspira cualquier cancerbero, dejar su portería a cero. El otro, el triunfo del cuadro amarillo ante el Huesca (0-2) que sirvió para inaugurar el casillero de victorias del recién ascendido. Desde el 2015 en el Ramón de Carranza, ha vivido el ascenso de Segunda B a Primera en este lustro y si antes de debutar ya era leyenda viva cadista, ahora también es historia de LaLiga.
Un colíder llamado Betis
Doblete andaluz en la cima de LaLiga tras dos jornadas. Si bien lo del Granada ‘no’ es noticia, sí lo es lo de un Real Betis que por pronto cuenta sus partidos por victorias. Y eso, es una tremenda noticia para la hinchada verdiblanca. Sin ir más lejos, hace justo un año, a estas alturas en lugar de ser colíderes eran ‘cocolistas’ junto al Alavés, ambos con un cero así de grande en el casillero de puntos. Así que arrancar con pleno no puede no generar el respeto hacia el ingeniero que ha construido unos cimientos sobre los que empezar a creer: Manuel Pellegrini. Con un 4-2-3-1 que varía en función de si se defiende o si se ataca, con más movilidad en los hombres de arriba, haciendo uso del juego combinativo pero sin complicarse atrás, la sensación es que aunque el equipo está en pleno proceso de asimilar ciertos conceptos, es mucho más sólido que el curso pasado. Que dure.
Un jugadorazo llamado Gerard Moreno
El Villarreal de Unai Emery ya carbura, aunque lejos de las expectativas generadas. Es evidente que los castellonenses se encuentran todavía en pleno rodaje, pero se vislumbran cosas interesantes en el planteamiento del técnico. Sin embargo, una cosa que no cambia a pesar del vaivén de entrenadores es el rendimiento de un delantero que sigue opositando, a ritmo de partidazos, para estar en la Eurocopa del año que viene. Se trata, cómo no, de Gerard Moreno, que en 180 minutos acumula 2 goles y una asistencia. Frente el Eibar (2-1) se le anuló uno pero se redimió con el tanto del empate en una fantástica maniobra en la que primero quebró con la izquierda y después definió con la derecha. Después, dio el pase a Alcácer que significó la diana del triunfo groguet. Gerard Moreno ha comenzado el curso tal y como lo empezó ―6 goles en 4 partidos― y terminó ―7 y 2 en 8― el pasado, evidenciando una conexión con su compañero de ataque de la que el Villarreal puede presumir.
