Nadie esperaba el 31 de mayo de 2018, fecha elegida por Zinedine Zidane para abandonar por sorpresa el Real Madrid tras haber conquistado en tiempo récord su tercera Champions League consecutiva, que el francés estaría de vuelta apenas nueve meses después, un 11 de marzo de 2019. «Este equipo debe seguir ganando y para eso necesita un cambio. Después de tres años necesita otro discurso, otra metodología de trabajo. Por eso tomé esta decisión», explicó el galo en una improvisada rueda de prensa que, cinco días después de haber logrado la decimotercera, no dejó indiferente a nadie. Florentino Pérez trató de seguir ganando primero con Julen Lopetegui y, tras no conseguirlo, con un Santiago Solari que finalmente ha sido víctima de la peor semana de la historia madridista. El argentino, que asumió las riendas del primer equipo tras dirigir al Castilla, fue la apuesta del máximo mandatario, una decisión que emuló a la que un 4 de enero de 2016 tomó cuando prescindió de Rafa Benítez para otorgarle el banquillo a Zidane. Sin embargo, la solución de apostar por el preparador del filial no trajo esta vez consigo resultados. O al menos, en los momentos determinantes. Por lo tanto, regresa a once jornadas del final de Liga, a doce puntos del Barcelona, eliminados de Copa y Champions, el autor intelectual de la felicidad del madridismo durante los últimos años. Vuelve Zidane, que firma por lo que resta de curso y tres temporadas más, hasta el 30 de junio de 2022.
¿Es un acierto despedir a Solari?
Sin duda. No sólo por claudicar en los partidos clave de la temporada —de los que no es el máximo responsable, ni mucho menos— sino porque al argentino se le podían hacer largos los dos meses y medio de curso que restan. Demasiados frentes abiertos: que si Marcelo, que si Isco, que si Bale… Hasta hace poco los resultados y la espiral del calendario iban tapando los problemas, pero ya sin ‘nada’ en juego y con la mente puesta ya en la próxima temporada, era absurdo mantener un preparador que no iba a liderar el siguiente proyecto.
¿Qué se espera de Zidane?
Que alivie el dolor que rodea al madridismo, básicamente. Que rebaje tensiones, que devuelva la normalidad. Que recupere para la ocasión a los futbolistas ‘defenestrados’ por Solari y que ponga fin a una temporada para olvidar de la manera más digna posible. Zinedine si por algo destacó en su primera y dorada etapa en banquillo merengue fue por las oportunidades que supo a dar a todos los miembros de la plantilla, haciéndolos partícipes de los éxitos y teniéndolo siempre en forma para cuando la ocasión lo requiriera. El francés debe aprovechar para analizar a sus jugadores y ver qué piezas encajan y qué otras no lo hacen de cara a la 19/20.
¿Por qué vuelve nueve meses después?
Eso sólo lo saben el galo y el presidente, pero según se desliza en ciertos medios, Florentino Pérez le habría garantizado disponer del poder que, el verano pasado, no tuvo. Se dice que ZZ pidió tras la conquista de la última Champions que no se dejara marchar a Cristiano Ronaldo; que se le abriera la puerta de salida a Bale y que no se reforzara la portería con Courtois —algo que ya se cumplió cuando no llegó Kepa por 20 millones en invierno del año pasado—. Se supone que ahora Zidane tendrá capacidad de decisión en la planificación de la próxima temporada. Son sólo conjeturas, pero tienen su sentido. Desde luego, la reestructuración es necesaria. Y comienza con ZZ.
En NdF | Los argumentos de Florentino
Foto | EFE
